Sumario: | El poder del Tao dilucida las enseñanzas fundamentales de Lao Tzu, aplicándolas a cuestiones a las que nos enfrentamos a diario en los ámbitos de la salud y el bienestar, el amor y el matrimonio, la creatividad y la profesión, los logros y ambiciones personales. La sabiduría taoísta puede restablecer el equilibrio en las relaciones humanas precarias, promover la cala ante la enfermedad y la muerte, y capacitarnos para ser mejores ciudadanos y líderes más sensatos. Armonizando la naturaleza y el sustrato humano, el Tao nos enseña a desarrollar nuestro verdadero potencial y a evitar la envidia, la avaricia y la ira. Más allá de la transformación de la vida de los individuos, el Tao contiene la promesa de una nueva era dorada de prosperidad, paz y fomento de la cultura.
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